lunes, 6 de abril de 2009

Cruda moral, cruda Lachapelle

Fui a ver la expo de Lachapelle. San Ildefonso me gusta, pero no es para un artista como él; es como exhibir un vestido Carolina Herrera color pistache en un precioso armario barroco de madera de cedro. O sea sí, los curadores hicieron lo suyito pero Lachapelle era para presentarlo en algo, algo más....gay?

Por lo demás, las fotitos rifan pero no me llevaron al éxtasis, un par quizá dos pares me cimbraron por su estética en general; el manejo de colores, el montaje escénico, las expresiones de los modelos; pero no encontré al genio surrealista de la fotografía, al crítico desvergonzado del capitalismo, al ábransechavos porque ya llegó Lachapelle, naaa.


Me gustó esta por los detalles bien chiditos, la cafetera italiana al fondo y dos huevos, a huevo¡.


Despuesito empezó el show. Me fui a comer un chilote en nogada y terminé extrasupermegaborracho, no por el chilote sino por los tequilas y las cervezas con que me desatoré el asunto. Hasta ahí digamos que todo en orden. Salí del lugar como a las 5pm y lo siguiente que recuerdo fue despertar como a las ocho de la mañana en una cama que no era la mía, desnudo de cabo a rabo, medio tapado con una sabanita. De inmediato verifiqué la integridad de mi trasero y billetera: El primero intacto (jeje), la segunda inexistente.

Después reconocí las paredes y el lugar. Casa de una amiga a la que tuve a bien llamarle en mi malacopeo y proponerle acostón. Ella dijo bueno ven, yo fui, tuve el descaro de soplarme un wiski más, desnudarme y quedarme jetón, ohh sí, si se trata de cagarse fuera de la bacinica, ese soy yoooo¡¡¡.

Bueno ya, ora quiero salir a echar trago en lunes, así de barbas.