lunes, 23 de febrero de 2009

Disco Taxi Diller

Días en que el ocio y la esterilidad
cubren las cosas
como un polvo finísimo
Eduardo Lizalde

La madrugada del viernes pasado abordé un taxi. Era un vocho ecológico con luces de neón por dentro y fuera, sonido de altas fidelidades, vestiduras de piel, dvd, una esfera de cristal de esas de disco ochentera de cuando Madona era virgen y John Travolta en el piso daba vueltas.* El chafirete, tipo de no más de 1, 57 (usaba dos cojines palcanzar los pedales), cabello corto, guantecito de piel en mano a la palanca, gorra Naik y demás artesanías de la modernidad, me abrió la puerta con mucha cortesía:

Hola, buenas noches, a dónde te llevo. A eje cinco, respondí, y no acababa de decir aquello, cuando, (usté perdone el lenguaje de experto que a continuación utilizaré, estimado y barbón lector) detecté que en ese auto alguien lestaba quemando las patas a Satanás, lestaba prendiendo fuego al regalo de reyes, jugaba canicas con la divinidad, sembraba humo pa obtener vida, fumaba mota pues.

-Ora ora, ya no son estas horas de fumar solo.
-Uy joven, es que lo vi muy fresa, por eso lo apagué, pero con gusto le damos.

Pero yo, barbones lectores, que he visto los comerciales de Mucho Ojo, dije este malandrín de seguro me quiere: a) asaltar b) follar c) vender drogas. Y tras medio segundo de sesuda reflexión (en el cual evalué las consecuencias, si me asaltaban pos no me quitarían mucho, si me follaban, tampoco me quitarían mucho, jejeje, y si me vendían drogas, pos las compraba) le di un par de caladas al cigarrillo y segundos después avenida de los Insurgentes fue música color y serenidad.


Stevie Wonder de fondo, mis oídos saturados:
- Que buen sonido caaab, que buen sonido me cai, y que buena yerba
-Uy, pero no sólo traigo yerba ira...

Y sacó de una meletita varias bolsitas de coca, tachas, piedra. Oraaaaaleeeee pero si eres todo un pinchi Disco Taxi Diller pensé pa mis adentros, aunque guardé la compostura y me limité a preguntar precios.

El taxímetro marcó 25 pesotes, pagué 50. Así de barbas.

*Calle 13 "Electromovimiento" del Disco, Los de atrás vienen conmigo